Los cuentos que no pude contarte

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Soy maestra y, no lo puedo evitar, me encantan los cuentos, tanto que era de las pocas cosas que tenía compradas para Álvaro con mucha antelación y que tengo guardadas para sus futuros hermanos.

Ya visualizaba a mi hijo en la cuna y a mí contándole cuentos, incluso iba a contárselos cuando estuviera en la incubadora pero no me dio tiempo ya que salí del hospital con los brazos vacíos y sin necesidad de volver porque ya no había nadie a quien visitar ni contar cuentos.

«De la cuna a la luna», «Adivina cuánto te quiero», «Los chivos chivones»…la lista es interminable, cuentos que he contado a mis alumnos mil veces y que les hacían quedarse embobados, pero que me hacía especial ilusión contar a mi bebé, a mi hijo.

Pues bien ese momento (como muchos otros: pasear un carrito de bebé por la calle, cambiar pañales, amamantar…) tendrá que esperar, es cierto que puedo contarlos mirando al cielo y estoy segura de que los escucharía pero no es lo que había imaginado ni como quiero que sea.

Se que Álvaro los escuchará tarde o temprano.

Sin embargo tras su pérdida, me he visto comprando cuentos que jamás pensé que compraría como «Siempre te querré pequeñín», «Vacío» o «Cuerpo de nube» solo con el título ya os podeis imaginar de que temas van.

Porque es verdad de que a pesar de ser ya bien adulta y de ser madre como dirían aquellas, sigo necesitando los cuentos para cualquier etapa de mi vida, cuentos para pensar, cuentos para crecer, en fin cuentos para vivir, debe ser deformación profesional como maestra que soy.

Esta última tanda de cuentos puede servirme en un futuro para explicar a los hermanos de Álvaro (estoy segura de que los tendremos) que hay una estrella muy brillante en el cielo (desde hace poco y gracias a su madrina ya sé cual concretamente) que nos cuida y nos protege a todos, incluidos ellos.

Siempre sonriendo allí arriba.

Estelita.

 

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3 comentarios

  1. Siempre hay un cuento que describe cualquier sentimiento, emoción o situación. Y como bien dices son apropiados para niños y para mayores. A mi también me encantan.

    1. Hola Marisol! Me alegra leerte por aquí de nuevo, te envié hace unos días ya un email privado a tu correo personal, lo leíste.
      Gracias por pasarte y comentar.

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